El VPH se transmite por contacto genital, más a menudo por relaciones sexuales vaginales y anales.
Casi todas las personas sexualmente activas contraerán VPH en algún momento de sus vidas, aunque en la mayoría de los casos no lo sabrán porque el VPH por lo general no presenta signos o síntomas.
• Existen unos 40 tipos de VPH genital. En la mayoría de los casos el VPH desaparece por sí solo sin causar ningún problema de salud. Se cree que el sistema inmunitario se defiende en forma natural de una infección por VPH.
• Pero algunas veces el VPH no se va por sí solo. Algunos tipos de VPH pueden causar verrugas genitales. Otros tipos de VPH pueden causar cáncer de cuello uterino y otros cánceres genitales menos comunes. Los tipos de VPH que causan verrugas genitales son distintos a los que pueden causar cáncer.
• No existe un tratamiento para el VPH (un virus), pero se pueden tratar las afecciones que causa, incluidas las verrugas genitales.
• Es común que las verrugas genitales reaparezcan (después de un tratamiento), especialmente en los tres meses posteriores al tratamiento.
• El tratamiento de las verrugas genitales no necesariamente reducirá el riesgo de contagiar el VPH a su pareja sexual. Es posible que usted transmita el virus a su pareja sexual, aun después de recibir tratamiento para las verrugas. No se sabe cuánto tiempo sigue siendo contagiosa una persona después de que se le han tratado las verrugas.
• Las verrugas que no son tratadas pueden desaparecer, permanecer igual o aumentar en tamaño o cantidad. Las verrugas genitales no se transformarán en cáncer con el paso del tiempo, aun cuando no hayan sido tratadas.
• Una mujer embarazada que tiene verrugas genitales presenta muy bajo riesgo de transmitir el VPH a su bebé. En casos raros, si hay transmisión del VPH, el bebé podría contraer verrugas en la garganta o en la laringe. Al parecer, los nacimientos por cesárea no evitan que la madre transmita el VPH a su bebé.