La ‘hormona del amor’ ayuda a reaccionar ante el miedo

La oxitocina mantiene la sensación de miedo sin que el individuo se quede del todo bloqueado.

La oxitocina es conocida como ‘la molécula del amor’ porque se segrega en grandes cantidades durante el parto y la lactancia, y se cree que refuerza las relaciones sociales. Ahora, científicos de Lausana afirman que cuando esta hormona actúa sobre la amígdala cerebral, evita que el individuo quede paralizado por el miedo, pero mantiene intacta la percepción del peligro para poder afrontarlo.
Ya se sabía que la oxitocina, una hormona que se segrega en el hipotálamo, inhibe el miedo al actuar sobre la amígdala, que es la estructura cerebral donde se origina esta sensación. Lo que ahora han descubierto investigadores de la Universidad de Lausana (Suiza)es que esta hormona no bloquea todas las reacciones generadas por el pánico: deja intactas las necesarias para actuar ante él.

“La oxitocina inhibe las respuestas al miedo que se proyectan desde la amígdala al tronco del encéfalo y que causan la parálisis del individuo”, explica  Ron Stoop, uno de los autores del estudio e investigador del Centro de Psiquiatría y Neurociencias de la Universidad de Lusanne (Suiza).

Hallan una hormona que podría actuar para prevenir la obesidad y la diabetes

Una hormona presente en el cuerpo humano, el péptido inhibidor de gastrina (GIP), es capaz de potenciar la pérdida de peso, mejorando la resistencia a la insulina y dando marcha atrás al proceso que da lugar a la aparición de la diabetes en los animales, según demostró el estudio realizado por investigadores de la Escuela de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Ulster (Reino Unido) y el Instituto Panum, de la Universidad de Copenague (Dinamarca), publicado en The American Journal of Physiology, de American Physiological Society.

Identifican una hormona que evitaría el aumento de peso por estrés

Investigadores de la Universidad de Georgetown en Washington (Estados Unidos) han reconocido una hormona que podría convertirse en una forma de terapia para evitar el aumento de peso que puede inducir el estrés. El resultado de la investigación se publicará en la edición digital de la revista ‘Nature Medicine’.

Los científicos han descubierto que una hormona, el neuropéptido Y (NPY), que participa en el control neural de la alimentación podría también estar relacionada con la a la obesidad producida por el estrés. El neuropéptido y que actúa sobre el cerebro para dirigir la necesidad de comer.