Las dietas bajas en folatos y algunas vitaminas se asocian a un mayor riesgo cardiovascular

“Tanto el ambiente como el estilo de vida pueden influir en la expresión y actividad de determinados genes que no vienen determinados por el ADN, es lo que los científicos conocen como alteraciones epigenéticas”, tal y como ha destacado el doctor Manel Esteller, Director del Laboratorio de Epigenética del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, en el XXI Congreso de la Sociedad Española de Arteriosclerosis. El ser humano es una mezcla de genes y de factores ambientales (la dieta, el tabaco, los estímulos intelectuales o la higiene) que pesan tanto o más como nuestro ADN y que acaban determinando nuestra huella genética.