En la Argentina, alrededor de 3.000 mujeres son diagnosticadas cada año con cáncer cérvicouterino. Por esta causa mueren 1.600 mujeres por año.
La enfermedad no viene sola. Un estudio publicado en 2007 demuestra que el diagnóstico de cáncer de cuello uterino vuelve más vulnerables y más pobres a las mujeres que lo padecen. (1)