Una mala alimentación en el embarazo y lactancia podría dañar la salud cardiovascular del hijo

Una mala alimentación durante el embarazo y la lactancia podría causar daños irreversibles perdurables en los hijos que van desde la enfermedad cardiaca a la diabetes, según un estudio realizado en modelos experimentales por investigadores del Real Colegio de Veterinaria en Londres (Reino Unido). Los resultados del estudio se publican en la edición digital de la revista Journal of Physiology.

Los investigadores, dirigidos por Stéphanie Bayol y Neil Stickland, alimentaron durante el embarazo y la lactancia a hembras de un modelo animal con una dieta de «comida basura» que incluía patatas fritas de bolsa, queso, magdalenas y otros alimentos procesados.

Las crías, que nacieron con sobrepeso, preferían la comida basura. Pero incluso cuando se les alimentaba con una dieta sana, las crías tenían una variedad de problemas médicos que duraban incluso hasta la vida adulta.

Tenían niveles elevados de colesterol y triglicéridos, ambos aspectos asociados con la enfermedad cardiovascular. La insulina y la glucosa en la sangre también eran demasiado altas y también son causa de diabetes tipo 2. Los animales seguían mucho más obesos que los normales con grasa extra alrededor de los riñones, otro factor de riesgo de la diabetes.

Los suplementos multivitamínicos previenen la muerte infantil y el aborto mejor que el hierro y ácido fólico

Un suplemento de múltiples nutrientes para mujeres embarazas es más eficaz que el hierro y el ácido fólico en solitario para prevenir la muerte infantil precoz y el aborto espontáneo, según un estudio de la Universidad de Mataram en Indonesia que se publica en la revista The Lancet.

Los investigadores realizaron un estudio de 31.290 mujeres embarazadas en Indonesia, 15.486 recibieron los suplementos de hierro y ácido fólico y 15.804 los suplementos multivitamínicos. En un caso las mujeres tomaban 30 mg de hierro y 400 microgramos de ácido fólico y en el otro la misma dosis de estos dos nutrientes más vitaminas A, C, D, E, B1, B2, B6, B12, niacina, zinc, cobre, selenio y yodo. Las mujeres tomaron los suplementos todos los días desde que se inscribieron al estudio hasta 90 días después del nacimiento de su bebé.

El embarazo no deseado afecta anualmente a más de 13 millones de mujeres menores de 20 años en todo el mundo

El embarazo no deseado afecta anualmente en el mundo a más de 13 millones de mujeres menores de 20 años. En España, sólo en 2005, más de 25.000 jóvenes menores de 20 años se quedaron embarazadas, casi un 30 por ciento más que en 1997, fecha en la que esta cifra empezó a aumentar de forma paulatina en nuestro país.

Según un experto la fertilidad de las mujeres es residual

A partir de los 38 años, la fertilidad de la mujer, o probabilidad de lograr un embarazo espontáneo, es residual, según anució el viernes el vicepresidente de la Sociedad Española de Fertilidad, el doctor Federico Pérez en el marco del curso ‘La perspectiva de género en el ámbito de la salud’, celebrado en la Universidad Autónoma de Madrid (UAM).

«Los resultados obtenidos a través del estudio de grandes poblaciones demuestran que a partir de los 35 años la fertilidad disminuye de manera considerable, y a los 38 años puede decirse que en la mayoría de casos la fertilidad es residual», afirmó el doctor Pérez, quien explicó que «se plantea de esta manera una nueva edad de reproducción social», lo que significa que la mujer empieza a plantearse el deseo de maternidad pasados los 30 años, al final de la edad de reproducción biológica.

Complejos multivitamínicos reducen un 18% el riesgo de bajo peso al nacer

Los complejos multivitamínicos (Complejo B, C y E) tomados todos los días, redujeron en un 18 por ciento el riesgo de que los neonatos presenten bajo peso al nacer, según revela un estudio publicado en la revista ‘New England Journal of Medicine’. La investigación también halló que, en un 23 por ciento, estos complementos nutricionales evitan que el bebé nazca con una talla menor a la esperada en su tiempo de gestación.

El parto vaginal se asocia en gran medida con los daños musculares ligados al prolapso de útero y vejiga

El parto vaginal se asocia en gran medida con los daños musculares ligados al desprendimiento de útero y vejiga, según muestra un estudio de la Universidad de Michigan (Estados Unidos) que se publica en la revista Obstetrics & Gynecology. Alrededor del 52 por ciento de las mujeres del estudio con prolapso informó además que durante el parto fue necesario el uso del fórceps, cerca de dos veces la cantidad de mujeres del estudio que no tenían el trastorno y en cuyos alumbramientos también se utilizó este instrumento. Según los investigadores, un aumento entre las mujeres que escogen tener a su hijo a través de una cesárea programada en los últimos años se debe en gran parte a la preocupación de que el parto vaginal pueda conducir al desprendimiento de la vejiga y el útero en años posteriores, algo que se ha convertido en objeto de debate en los círculos médicos.

Ganar más de 2 kg al mes durante el embarazo aumenta el riesgo de hipertensión

“Si la embarazada aumenta su peso en más de 2 kilos al mes, si tiene una edad elevada en su primer embarazo, si se trata de una gestación múltiple (con frecuencia como consecuencia de una fecundación in vitro), si padece diabetes u obesidad, el riesgo de desarrollar hipertensión y preeclampsia es mucho mayor”, asegura la doctora Nieves Martell, coordinadora del Club del Hipertenso de la Sociedad Española de Hipertensión.

Tener un bajo peso al quedar embarazada incrementa posibilidades de aborto en un 72%

Las posibilidades de sufrir un aborto en los tres primeros meses de embarazo es un 72 por ciento más alta en las mujeres que antes de quedarse embarazadas tenían un índice de masa corporal bajo. Así lo afirma un estudio desarrollado por la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres (Reino Unido) y que aparece publicado en la revista Journal of Obstetrics and Gynaecology. Los autores de la investigación explicaron que estos riesgos se pueden reducir significativamente con el consumo de suplementos y frutas y verduras frescas.