Niños en edad escolar: consejos para prevenir dolores de espalda

El 42% de los menores de once años sufre de dolores de espalda.

El 42 por ciento de los menores de once años sufre dolores de espalda, siendo las niñas, las más afectadas, y una de las principales causantes de esta dolencia es el peso excesivo de las mochilas. Para prevenir se deben tener en cuenta el peso, la ajustabilidad y el uso de la carga en cuestión.

“Numerosos estudios indican que existe un riesgo altísimo de que los niños sufran dolor de espalda y que en el futuro desarrollen daños estructurales en su columna si durante su edad escolar transportan peso excesivo en sus mochilas. Esta situación presenta mayor amenaza para las mujeres que para los hombres”, señala Sebastian Astorino, gerente general de RiesgoLab Consulting Group (www.riesgolab.com), consultora especializada en salud ocupacional y  gestión ambiental. “Conductas muy simples y cotidianas que normalmente se efectúan en forma rutinaria, como ser el uso de las mochilas, se realizan de manera casi mecánica, sin prestarle demasiada atención y sin pensar que conllevan riesgos que deben ser prevenidos”, explica Astorino.

Las patologías de huesos y articulaciones crecerán esta década

En los próximos años se va a registrar un incremento en la incidencia de las enfermedades relacionadas con huesos y articulaciones, debido a la tendencia demográfica al mayor envejecimiento poblacional, según lo han expresado los expertos reunidos en una conferencia desarrollada en la Real Academia Nacional de Medicina. Así, el presidente de la Comisión Nacional de Cirugía Ortopédica y Traumatología, Luis Munuera, afirmó que “el impacto de estas enfermedades va a ser tan importante que desde el año 2000, y a iniciativa de la OMS, nos encontramos en la década de los huesos y las articulaciones”.

Apoyar el antebrazo durante el trabajo ante un ordenador puede evitar dolores en hombros, cuello y brazo

Apoyar el antebrazo durante el trabajo ante un ordenador puede evitar dolores en hombros, cuello y brazo y posibles trastornos en estas zonas, según un estudio de la Universidad de California en Los Ángeles, EEUU, publicado en ‘The British Journal of Occupational and Environmental Medicine’.