La acupuntura china tradicional (TCA), donde agujas muy finas se utilizan para estimular los puntos específicos del cuerpo para obtener respuestas terapéuticas beneficiosas, puede ser una opción terapéutica eficaz para pacientes que sufren de disfunción olfatoria persistente post-viral (EPVO) , según una nueva investigación en el ejemplar de abril 2010 de Otolaryngology – Head and Neck Surgery.
La disfunción olfatoria puede surgir de una variedad de causas y pueden influir profundamente en la calidad de vida de un paciente. El sentido del olfato determina el sabor de los alimentos y bebidas y también sirve como un sistema de alerta temprana para la detección de los riesgos ambientales, tales como alimentos en mal estado, con fugas de gas natural, humo o contaminantes del aire. La pérdida o la distorsión de la sensación olfato pueden influir negativamente en la preferencia de alimentos, la ingesta de alimentos, y el apetito.
Aproximadamente 2 millones de estadounidenses experimentan algún tipo de disfunción olfatoria. Una de las causas más frecuentes de pérdida del olfato en los adultos es una infección del tracto respiratorio superior (URI). Los pacientes suelen quejarse de la pérdida de olor a raíz de una URI virales. La pérdida de olfato es más parcial y reversible. Sin embargo, en ocasiones los pacientes también pueden presentar parosmia (una distorsión del sentido del olfato), fantosmia (oler cosas que no existen), o un daño permanente del sistema olfativo.
Hasta la fecha, no hay farmacoterapéutica validado para EPVO, pero se han hecho intentos para establecer un tratamiento estandarizado. En la literatura, los esteroides sistémicos y tópicos, así como los suplementos de vitamina B, caroverine, el ácido alfa lipoico, y otras drogas se utilizan para tratar a los pacientes. Los investigadores señalan que además de estos tratamientos, las medicinas complementarias y alternativas están siendo utilizados por muchos pacientes por cuenta propia, y que la exploración de su utilidad debe ser validado por la medicina occidental tradicional.
En el presente estudio, 15 pacientes que acudieron a una clínica ambulatoria con EPVO fueron tratados por TCA en 10 sesiones semanales de 30 minutos. Una olfatometría subjetiva se realizó mediante el test de Sniffin ‘Sticks. El éxito del tratamiento se definió como un incremento de al menos seis puntos en los resultados de las pruebas. Los efectos de TCA fueron comparados con parejas de personas que sufren de EPVO que habían sido tratados con complejo vitamínico B. Ocho pacientes tratados con ATC mejoraron la función olfatoria, en comparación con dos tratados con complejo vitamínico B.
Los autores reconocen que su estudio está limitado por su tamaño, y que futuros estudios deberían llevarse a cabo en una población mayor. Sin embargo, los autores escriben «… la alta tasa de respuesta observada de cerca de 50% bajo TCA fue superior a la del complejo de vitamina B o el de la remisión espontánea, y ofrece un posible nuevo régimen terapéutico en la disosmia posvírica».
Fuente: Eurekalert