Prolongar el periodo de lactancia hasta que el bebé ha cumplido los seis meses puede evitar, cada año, la muerte de 1.300.000 niños menores de cinco años, según un estudio de UNICEF que se ha dado a conocer con motivo del inicio de la ‘Semana Mundial de la Lactancia Materna’, que este año tiene como tema la iniciación temprana.
El trabajo que recoge la ONG, elaborado en Ghana y publicado en la revista médica Pediatrics, concluye asimismo que la leche materna administrada a los bebés inmediatamente después del nacimiento puede reducir considerablemente la mortalidad neonatal en los países en desarrollo.
En concreto, «es posible evitar el 16 por ciento de las muertes neonatales mediante la lactancia materna desde el primer día de vida» del bebé, «una cifra que puede aumentar al 22 por ciento si la lactancia comienza durante la primera hora después del nacimiento».
Según la directora ejecutiva de UNICEF, Ann M. Veneman, «más de una tercera parte de las muertes infantiles se producen durante el primer mes de vida, una etapa muy delicada» en la que «el amamantamiento temprano proporciona nutrientes fundamentales, protege a los recién nacidos contra enfermedades mortales y fomenta el crecimiento y el desarrollo».
Este hecho adquiere especial relevancia en los países africanos, donde el diez por ciento de los bebes mueren antes de cumplir su primer año de vida y la mayoría de las muertes neonatales se producen en el hogar. Aunque la tasa de la lactancia materna exclusiva hasta la edad de seis meses ha aumentado en más del doble en la región desde 1990 -hasta un 30%- «todavía hay cientos de miles de niños y niñas vulnerables a las enfermedades y a la muerte», explicó UNICEF.
La Semana Mundial de la Lactancia Materna se inició en 1992 y en la actualidad UNICEF y sus aliados y colaboradoras la celebran en 120 países. Entre las entidades que apoyan la iniciativa se encuentran la Alianza Mundial Pro Lactancia Materna y la Organización Mundial de la Salud.
Fuente:www.azprensa.com