La memoria, velocidad de pensamiento y otras habilidades cognitivas pueden empeorar a lo largo del tiempo con el consumo de marihuana, según un estudio del Hospital Universitario de Patras (Grecia) que se publica en la revista Neurology.
El estudio descubrió que los consumidores habituales de marihuana, en comparación con los no consumidores, realizan peor las pruebas de habilidades cognitivas, incluyendo las de atención compartida, una capacidad que permite prestar atención a más de un estímulo a la vez, y las de fluidez verbal, o número de palabras generadas en un periodo de tiempo limitado. Aquellos que habían consumido marihuana durante diez años o más tenían más problemas en su capacidad de pensamiento que aquellos que la habían consumido durante entre cinco y diez años. Todos los consumidores de la droga eran habituales y consumían cuatro o más cigarrillos de marihuana a la semana.
Según Lambros Messinis, autor principal del estudio, a mayor tiempo de consumo, mayor fue el deterioro en las habilidades cognitivas que mostraban estas personas, sobre todo en el caso de la capacidad para aprender y recordar información nueva. «En varias áreas, sus capacidades podían ser consideradas deficitarias y en el caso de los consumidores a largo plazo más que en los que llevaban un periodo más corto de tiempo de consumo», señala Messinis.
En el estudio participaron personas de entre 17 y 49 años que formaban parte a su vez de un programa de tratamiento en Atenas (Grecia). De ellos 20 eran consumidores a largo plazo, 20 a corto plazo y 24 eran individuos que habían tomado marihuana al menos una vez en su vida pero no más de en 20 ocasiones y no en los dos años anteriores. Ninguno de los participantes tomó la droga en las 24 horas previas a la realización de las pruebas.
Según los científicos, los consumidores de marihuana se desenvolvieron peor en varios dominios cognitivos, incluyendo las funciones cerebrales del recuerdo demorado, la identificación y las funciones ejecutivas. Por ejemplo, en una prueba que medía la capacidad para tomar decisiones, los consumidores a largo plazo tuvieron una realización deficiente en un 70 por ciento, en comparación con el 55 por ciento de los consumidores a corto plazo y el 8 por ciento de los que no consumían la droga.
Los autores explican que en otra de las pruebas en la que los participantes necesitaban recordar una lista de palabras que habían sido leídas con anterioridad, los que no eran consumidores recordaron una media de 12 de las 15 palabras, los consumidores a corto plazo recordaron una media de nueve palabras y en último lugar, los consumidores a largo plazo recordaron una media de siete palabras.
Fuente: www.azprensa.com