Investigadores de la Escuela de Medicina Albert Einstein de Estados Unidos han descubierto que reducir los niveles de ácidos grasos del hipotálamo provoca que las ratas coman demasiado y desarrollen obesidad. Sus resultados, que se publican en la edición digital de la revista Nature Neuroscience, sugieren que restablecer los ácidos grasos en el cerebro podría ser una forma de tratar la obesidad y otras enfermedades derivadas de la misma, como la diabetes.
Los expertos explican que la región cerebral del hipotálamo mantiene el estado nutricional del organismo a través del control de los niveles sanguíneos de diferentes hormonas y nutrientes. En función de esta información, el hipotálamo regula el consumo de energía y el metabolismo.
En un estudio publicado el pasado año en la revista Science, los científicos mostraron cómo el hipotálamo controla y regula los niveles de glucosa en el organismo. El trabajo actual muestra que esta región del cerebro también controla los niveles de ácidos grasos y responde mediante la regulación del apetito.
La investigación se centró en la molécula malonyl CoA, que está directamente relacionada con la función que ejerce el hipotálamo sobre las conductas alimenticias. Estudios anteriores habían mostrado que los niveles en el hipotálamo de malonyl CoA aumentan de forma destacada después de las comidas y se suprimen durante el ayuno.
Con el fin de determinar si la supresión continuada de esta molécula en el hipotálamo podría dar lugar al desarrollo de obesidad, introdujeron una enzima que degrada el malonyl CoA en un virus, que posteriormente fue inyectado en el hipotálamo de las ratas. Las inyecciones causaron una alteración crónica en los niveles de malonyl CoA, que dieron lugar a un aumento en el consumo de comida por parte de las ratas, que desarrollaron obesidad. La situación se mantuvo durante al menos cuatro meses.
Según Luciano Rossetti, autor principal del estudio, los resultados muestran que la alteración de los niveles de malonyl CoA en el hipotálamo deteriora el mecanismo de detección de esta molécula por el que el hipotálamo modula el consumo de comida para mantener el peso normal. Por tanto, Según Rossetti, este descubrimiento podría conducir al desarrollo de no sólo para tratar la obesidad, sino también para evitar la diabetes y otras consecuencias del sobrepeso.
Fuente: www.azprensa.com