Un estudio paneuropeo presentado en el IX Congreso de la Federación Europea de Sociedades Neurológicas ha puesto de manifiesto la condición invalidante de la migraña. Según el estudio PROMPT (Patient Reaction and Opinion to Migraine Pain and Treatment), realizado con 1.500 pacientes diagnosticados de migraña de Alemania, Italia, Países Bajos, España, Suiza y Reino Unido, las personas que padecen migraña se ven forzadas a perder una media de diez días de trabajo o estudio al año, lo que equivale a casi una jornada al mes.
Consulta al médico
Muchas personas sufren en silencio este problema y los resultados de la encuesta indican que casi la mitad de los pacientes con migraña tarda más de tres años en consultar a un médico por esta patología. Según precisó, el doctor Reto M. Agosti, reconocido especialista en la migraña y director del Headache Center Zurich Hirslanden de Suiza, en este sentido se encontraron algunas diferencias entre los países europeos. Por ejemplo, en España e Italia, las personas afectadas tardan algo menos en consultar al médico y empezar a tomar la medicación. Aunque Agosti precisó que el estudio PROMPT no ha profundizado en las causas de estas diferencias, este experto apunta a las características de los sistemas sanitarios en los distintos países europeos.
En España, Suecia y Reino Unido los pacientes también toman la medicación en la primera media hora tras el comienzo del ataque de migraña. Una circunstancia que, según Agosti, es importante porque aumenta las oportunidades de atacar la enfermedad y, además, disminuye la frecuencia y la severidad de los ataques.
Este estudio se realizó con el objetivo de resaltar las necesidades y preocupaciones de las personas con migraña y para esto se ha preguntado cómo se sienten y lo que desean con respecto a ciertos aspectos de su enfermedad, desde el tratamiento hasta las consecuencias de esta condición en su vida social.
Hallazgos
La encuesta PROMPT reveló que el 92 por ciento de los participantes coincide en que las personas que no padecen migraña no comprenden la gravedad de este problema. Durante las últimas cuatro semanas antes de la encuesta, el 87 por ciento de los pacientes afirma que las migrañas habían afectado a su capacidad para concentrarse en el trabajo o en sus actividades cotidianas, el mismo porcentaje de encuestados manifiesta que los ataques de migraña les han hecho perder vitalidad, y el 83 por ciento cree que la enfermedad ha afectado a sus relaciones con la familia y los amigos. Asimismo, un 80 por ciento dice que las migrañas les han hecho sentirse hastiados y frustrados y el 85 por ciento declara que esta condición afecta a las relaciones íntimas con sus parejas.
Un efecto rápido
Otro de los resultados relevantes del estudio presentado en Atenas está relacionado con las expectativas que tienen los pacientes de migraña acerca del tratamiento disponible para su dolencia. Así, según la encuesta, los pacientes que tomaban triptanes declaraban que estos fármacos tenían un efecto más rápido sobre los síntomas que el resto de los analgésicos tradicionales.
Para la mayoría de los enfermos que participaron en la encuesta el hecho de que el fármaco “comience a actuar rápido” es la característica más importante que debe tener un tratamiento contra la migraña, seguida por la ausencia de ataques recurrentes y la posibilidad de recuperarse “con mayor rapidez”. Esto indica que los pacientes con migraña desean, ante todo, obtener un alivio rápido que les permita reanudar su actividad normal con la mayor rapidez posible.
En términos generales, menos de la mitad de los encuestados indicó que tomaba su medicación con 30 minutos de antelación al ataque de migraña. Por lo tanto, cuando las personas que sufren esta enfermedad no toman su tratamiento en este periodo de tiempo, prefieren optar por un medicamento de inicio de acción más rápido. “Los triptanes actúan más rápido y esto es lo que quieren los pacientes: recuperarse lo antes posible”, explica Agosti.
Este experto indicó que, en cualquier caso, los tratamientos son “individuales” y “excepcionales”. Es decir, que funcionan de manera diferente en cada paciente. Un número importante de enfermos tiene antecedentes de migraña en la familia y si se identifica una terapia que funciona con algún familiar se opta por el mismo patrón terapéutico.
Fuente: www.azprensa.com