La Organización Mundial de la Salud (OMS) está reescribiendo la guía de cómo los niños debeían crecer en tiempo y en peso. Sus nuevas pautas sanas del crecimiento, que será lanzado el año próximo, debería ayudar a luchar contra la desnutrición y la obesidad.
Actualmente, los ayudantes de sanidad por todo el mundo juzgan si los bebés y los niños están creciendo bien basandose en curvas estándares de altura y peso elaborados en los años 70. Las cifras estaban calculadas en datos de niños de los E.E.U.U., quiénes fueron alimentadas principalmente con fórmula infantil.
Por los años 90, los defectos con patrones llegabaron a estar mas claros. El problema principal es que niños con alimentación materna tienden a ser más delgados que ésos alimentados con fórmula. Aconsejan por lo tanto a las madres a cambiar al alimento sólido prematuramente, aunque la leche materna se considera la opción más sana porque puede ayudar a luchar contra enfermedades infecciosas. También no estaba claro si la estadística para los niños de los E.E.U.U. se podria aplicar en otros países.
Ahora un extenso, el proyecto de 14 años para substituir los estándares anticuados está viniendo a la luz. En el estudio multicentrico Growth Reference Study, los doctores siguieron a alrededor de 8.500 niños de Brasil, Ghana, India, Noruega, Omán y los Estados Unidos desde el nacimiento hasta los cinco años de edad. Los investigadores siguieron la altura, peso, circunferencia principal y la edad en las cuales los bebés gatearon y caminaron.
A diferencia de los estudios anteriores para calibrar crecimiento, seleccionaron a los participantes específicamente para estar en lo mejor de la salud, las madres no fumaron y los niños eran amamantados. La idea es crear una referencia que demuestre cómo los niños deben crecer idealmente; los expedientes anteriores registraron el crecimiento de niños de salud que variables.
El proyecto ha demostrado ya que bebés bien alimentados tienden a crecer en el mismo índice sin importar su grupo étnico, dice la coordinadora del proyecto Mercedes de Onis de la OMS, basado en Ginebra, Suiza. Esto ayuda a la resolución de una discusión de muchos años, sobre si los índices de crecimiento que varían en diversos países son debido a las diferencias genéticas o a otras causas, por ejemplo la nutrición o la enfermedad.
La OMS todavía está analizando los datos y planea lanzar los estándares del crecimiento con fanfarrias el año próximo. Entonces emprenderá un esfuerzo enorme de entrenar a trabajadores de la salud en 100 países para cambiar a las cifras más últimas.
El nuevo sistema de estándares tendrá implicaciones para el bienestar público. «es el indicador básico de la salud,»dice de Onis. Las cifras deben ayudar a identificar qué niños son subalimentados y se le debe dar alimento u otra ayuda. La esperanza es marcar niños, tan pronto como comiencen a mostrar parametros de malnutrición, antes de que la condición llega a ser severa.
En el otro extremo de la escala, el nuevo criterio debe seleccionar a los niños que pesan sobre la norma y se están dirigiendo hacia la obesidad. Porque los niños amamantados crecen más lentamente que los alimentados a formula, los nuevos estándares empujarán a más niños en la categoría obesa, de Onis dice.
Hay una necesidad mejores referencias de peso para niños mayores y adultos también, dice Keith West que estudia salud y nutrición internacionales en la escuela de Johns Hopkins Bloomberg de la salud pública en Baltimore, Maryland. Pero porque la salud de los niños puede influenciar el bienestar para el resto de su vida, establecer normas sanas «es más crítico para los niños,»él dice.
Fuente Nature